Domina tu vida: poderosas técnicas de afrontamiento para resolver problemas y recuperar el timón

Las técnicas de afrontamiento de problemas son estrategias que utilizamos para manejar situaciones difíciles o estresantes. Estas técnicas pueden ser muy útiles para resolver conflictos, reducir el estrés y mejorar el bienestar emocional. Se pueden clasificar en varias categorías:

1. Técnicas de afrontamiento centradas en el problema en sí. Estas técnicas buscan cambiar o eliminar la fuente del estrés o problema. Son útiles cuando tenemos cierto control sobre la situación que estamos experimentando:

  • Definimos el problema: identificar claramente cuál es el problema real que se debe resolver. A veces, el estrés puede hacer que un problema parezca más grande de lo que en realidad es.
  • Generamos soluciones: brainstorming o lluvia de ideas para encontrar varias formas de solucionar el problema. No importa si parecen irreales al principio; el objetivo es abrirse a todas las posibilidades (a menudo la solución es una combinación de distintas propuestas).
  • Evaluamos las alternativas posibles: analizar las posibles soluciones, considerando los pros y los contras de cada una y seleccionando la más adecuada.
  • Planificar la acción: crear un plan específico de pasos para implementar la solución elegida. Diseña un plan que contenga objetivos medibles y que se puedan completar diariamente. Te puedes ayudar de aplicaciones como todoist. 
  • Buscar información o ayuda: a veces es necesario obtener más información o acudir a otras personas que puedan ofrecer ayuda o consejo. Quizá nosotros no tengamos toda la información necesaria para solucionarlo. 

2. Técnicas de afrontamiento centradas en la emoción. Están diseñadas para manejar el malestar emocional que acompaña a una situación estresante. Son útiles cuando el problema está fuera de nuestro control o no podemos cambiar la situación.

  • Relajación: técnicas como la respiración profunda, la meditación, el yoga o la relajación muscular progresiva pueden ayudar a reducir la ansiedad y el estrés.
  • Reestructuración cognitiva: consiste en cambiar la forma en que pensamos sobre el problema, transformando pensamientos negativos o irracionales en más positivos o realistas. Esto ayuda a disminuir la carga emocional del problema y dimensionarlo de una forma más adecuada.
  • Distracción saludable: realizar actividades que nos saquen de la situación estresante, como hacer ejercicio, leer, escuchar música, etc.
  • Expresar emociones: hablar sobre lo que sentimos con amigos, familiares o un terapeuta puede ayudar a procesar las emociones de manera más efectiva.

3. Afrontamiento basado en la evitación. Es un estilo de afrontamiento en el que se evita la confrontación directa con el problema. En algunos casos puede ser útil a corto plazo, pero no es recomendable como estrategia a largo plazo.

  • Negación: ignorar el problema o pretender que no existe. Aunque puede ayudar momentáneamente a reducir el estrés, no es una solución a largo plazo.
  • Postergar o evitar: evitar la situación estresante de forma consciente. Puede ser útil si es necesario esperar un mejor momento para abordarlo, pero a largo plazo puede generar más ansiedad.

4. Afrontamiento proactivo. Es un enfoque preventivo, donde las personas toman medidas anticipadas para evitar que surjan problemas en una determinada área o para minimizar su impacto cuando ocurran.

  • Planificación anticipada: pensar en los posibles problemas antes de que ocurran y preparar soluciones con antelación.
  • Establecimiento de metas: establecer metas claras y realistas, lo que permite tener un propósito y una dirección que puede reducir la ansiedad sobre el futuro.
  • Mejorar habilidades: desarrollar nuevas competencias o recursos que faciliten el afrontamiento de problemas futuros.

5. Apoyo social. Buscar y aceptar ayuda de otras personas es clave en el afrontamiento. El apoyo social puede provenir de amigos, familiares, grupos de apoyo y psicoterapeutas.

  • Hablar con alguien de confianza: compartir las dificultades con alguien cercano puede brindar alivio emocional.
  • Buscar apoyo profesional: terapias como la cognitivo-conductual (TCC) son útiles para manejar el estrés y problemas emocionales.

6. Afrontamiento basado en la resiliencia. Consiste en fortalecer la capacidad de adaptarse y recuperarse de situaciones difíciles, aprendiendo de la experiencia.

  • Buscar el lado positivo: desarrollar una mentalidad optimista y encontrar aspectos positivos o aprendizajes en situaciones difíciles.
  • Aceptar lo que no se puede cambiar: aceptar que algunas situaciones están fuera de nuestro control y centrarse en lo que sí podemos controlar.
Cada técnica puede ser más o menos útil dependiendo del tipo de problema y de la persona, 
pero en general, una combinación de estos enfoques es efectiva 
para manejar diversas situaciones.
Recuerda, no siempre puedes controlar lo que sucede a tu alrededor, 
pero siempre puedes elegir cómo afrontarlo.

 

El salario emocional: ofrecer algo más que trabajo

En el competitivo mundo laboral actual, el salario emocional ha cobrado gran relevancia como un complemento vital al salario económico. Aunque los incentivos monetarios siguen siendo importantes, cada vez más empleados valoran aquellos aspectos no tangibles que afectan a su bienestar en el trabajo. Entonces, ¿qué es el salario emocional y cómo puede transformar la cultura de tu empresa?

Definición de salario emocional

El salario emocional se refiere a todos aquellos beneficios no económicos que una empresa ofrece a sus trabajadores para mejorar su calidad de vida y bienestar general. Estos beneficios están orientados a satisfacer necesidades psicológicas, sociales y emocionales de los trabajadores, lo que genera un mayor compromiso y lealtad hacia la empresa.

¿Qué puedo hacer para lograr que mis trabajadores se involucren en mi proyecto empresarial? Ejemplos de salario emocional

Existen diferentes formas en las que tú como empresario puedes proporcionar salario emocional a tus trabajadores, entre las que destacan:

  • Flexibilidad laboral. La posibilidad de trabajar desde casa o ajustar los horarios según las necesidades personales de cada trabajador es uno de los principales factores que incrementa la satisfacción de los empleados. Podrías pensar que entonces organizar los horarios se convertirá en un caos: todo lo contrario. Verás como fluye la comunicación entre tus trabajadores y aumenta su productividad y compromiso con la empresa.  
  • Reconocimiento y valoración del trabajo realizado, Un simple "gracias" o un reconocimiento público puede tener un impacto positivo muy importante en la motivación y el sentido de pertenencia. Puedes obtener mucho a cambio si tratas con la sensibilidad adecuada a cada trabajador.
  • Oportunidades de desarrollo. La formación continua y las posibilidades de crecimiento dentro de la empresa son altamente valoradas por aquellos que buscan mejorar profesionalmente.
  • Buen ambiente de trabajo. Un entorno de trabajo saludable, donde primen el respeto y la comunicación abierta, es esencial para el bienestar emocional. La implementación de un ambiente saludable tiene coste cero para la empresa y los beneficios que se obtienen a cambio son incomensurables.  
  • Conciliación vida personal y profesional. Desarrollar políticas que permitan a los empleados equilibrar su vida laboral con su vida personal es un factor clave para que se produzca el paso de trabajador junior a senior de forma satisfactoria. Recuerda que los seniors aportan algo que no aportan los juniors: experiencia.

¿Por qué es importante el salario emocional?

El salario emocional no solo beneficia a los empleados, sino también a las empresas. Un trabajador satisfecho, motivado y comprometido es más productivo y tiene menos probabilidades de abandonar la organización. Esto se traduce en menor rotación de personal, reducción de costos de reclutamiento y un ambiente laboral más positivo (recuerda que cuando hay demasiada rotación de personal, el elemento tóxico de la empresa es el jefe: analiza bien cómo funciona tu empresa desde todos los niveles). Además, está comprobado que aquellos empleados que reciben un buen salario emocional presentan mejores niveles de creatividad, innovación y eficiencia. La idea que subyace detrás de todo esto es que los trabajadores valoren el pertenecer a tu empresa como una de las cosas más positivas que les ha podido pasar en su vida.

El salario emocional ha dejado de ser una tendencia para convertirse en una necesidad real dentro del entorno laboral. Los empleados ya no buscan únicamente una buena remuneración económica (que es importante), sino también sentirse valorados y realizados dentro de sus empresas. Invertir en bienestar emocional de tus trabajadores no solo mejorará la retención de talento, sino que también potenciará el éxito y el crecimiento empresarial a largo plazo. Recuerda: si una empresa funciona, es gracias a sus trabajadores.