¿Por qué tus relaciones no se prolongan en el tiempo? Descubre si estás eligiendo mal

 

¿Te has preguntado alguna vez por qué tus relaciones afectivas no duran? ¿Piensas que podrías mejorar tus elecciones de pareja? Aquí exploramos algunas creencias y factores que podrían estar saboteando tus decisiones:

1. El amor todo lo puede

Creer que el amor es suficiente para superar cualquier obstáculo es un error común. Sin intereses y proyectos comunes, sin respeto y sin trabajo constante en la relación, el amor por sí solo no bastará. Quererse no es suficiente.

2. Cambiar por ti

Es normal que haya aspectos de nuestra pareja que no nos gusten, pero pensar que esos "defectos" desaparecerán solo por estar con nosotros es engañarnos. Nadie cambiará por ti a menos que quiera hacerlo por sí mismo.

3. Roles extraños en la relación

El instinto de protección y cuidado puede llevarnos a adoptar roles de "rescatadores" o "salvadores". No somos responsables de la felicidad de otra persona adulta. No somos padres ni madres, somos parejas.

4. Ansia de maternidad o paternidad

Elegir a cualquier persona para cumplir el deseo de ser padres puede reflejar carencias emocionales o heridas del pasado. Es crucial ser consciente de esto para no tomar decisiones apresuradas.

5. Miedo a la soledad

Buscar constantemente una relación para llenar un vacío o gestionar la soledad es un error. Para ser feliz con otra persona, primero debes aprender a ser feliz contigo mismo.

6. Ausencia de proyectos comunes

Para que una relación prospere, ambos miembros deben mirar hacia el mismo futuro. Compartir objetivos, metas y planes de vida es esencial. Sin planes en común, la relación tendrá dificultades para durar.

7. Mal comienzo

Si la relación no fue honesta desde el principio, es poco probable que mejore con el tiempo. Esto incluye relaciones que comenzaron en la clandestinidad; la infidelidad tiene altas probabilidades de repetirse.

8. Amores tormentosos

Las relaciones tóxicas no mejoran con el tiempo. Pensar que el amor debe ser pasional e intenso hasta el tormento es un error. Las relaciones saludables no son tormentosas.

9. Enamoramiento vs. Amor

Confundir el enamoramiento con el amor es un error. El enamoramiento es la primera etapa, el amor es la segunda. Muchas parejas se disuelven al pasar de la primera etapa a la segunda.

10. Perder la identidad

Fundirse en la otra persona hasta perder tu propia identidad es peligroso. Compartirse es maravilloso, pero si no puedes ser tú mismo, la relación está destinada a fracasar. No finjas ser alguien que no eres.

Pregunta Reflexiva:

¿Cuál de estas creencias crees que ha afectado más tus relaciones pasadas?

¡Comparte en los comentarios qué creencia crees que podrías cambiar para mejorar tus futuras relaciones o cuéntanos alguna experiencia personal aplicando estos consejos!

Generando cambios

¿Alguna vez has sentido que necesitas un cambio pero no sabes por dónde ni cómo empezar?

Aquí tienes algunas pautas que pueden ayudarte a conseguir el cambio que estás buscando.

1. Acepta que el cambio no sucede de un día para otro

Cambiar es un viaje continuo que requiere tiempo y paciencia contigo mismo/a. Reconocer esto es el primer paso para evitar frustraciones y mantenerte enfocado/a en tu objetivo a largo plazo.

2. Acepta que el mundo y los demás no van a cambiar

Si no estás satisfecho/a con tus relaciones personales o laborales, eres tú quien tiene que poner en marcha mecanismos para modificar la situación hasta alcanzar el bienestar que deseas. No esperes que los demás cambien por ti.

3. Hazte preguntas

  • ¿Qué es lo que quiero cambiar exactamente?
  • ¿Mi vida profesional?
  • ¿Mis relaciones personales?
  • ¿Hábitos de salud física?

Identificar qué aspectos específicos quieres cambiar te ayudará a establecer metas claras.

4. Identifica las razones

Entiende para qué quieres cambiar y cuáles son los beneficios que esperas obtener. Si tienes un “para qué”, encontrarás el “cómo”. Esto te proporcionará la motivación necesaria para seguir adelante.

5. Reconoce tus hábitos actuales

Reflexiona sobre tus comportamientos actuales en todos los ámbitos y cómo se relacionan con la persona que quieres ser o el bienestar que deseas conseguir. Deshazte de los hábitos que no te están ayudando.

6. Deja atrás lo que no sirve

Cambiar implica saber dejar atrás cosas, personas o situaciones. A menudo, el precio del cambio es un duelo por lo que hemos perdido o decidido perder en este camino. Sentir tristeza durante el proceso no significa que las situaciones o relaciones anteriores fueran buenas para ti.

7. Establece un límite de tiempo

Fija plazos a corto y medio plazo, como 2 meses y 6 meses, para evaluar tu progreso y ajustar tus acciones según sea necesario.

8. Dedica tiempo cada día

Es imposible que cambies cosas si no le dedicas el tiempo suficiente. Reserva dos horas diarias para trabajar en tu cambio. Durante ese tiempo, estás trabajando en ti. Encuentra ese tiempo entre todas tus tareas diarias, tú eres tu prioridad.

9. Busca recursos y herramientas

Libros, cursos, recursos en línea... Encuentra las herramientas que te ayuden a alcanzar tus objetivos.

10. Levántate una hora antes

Aprovecha las primeras horas de la mañana para planificar tu día. Organiza una lista de tareas diarias para generar rutinas. Incluye en esa rutina tus dos horas de gestión de cambio, es decir, tu tiempo para ti.

11. Gestiona el duelo y la soledad

Gestionar el duelo y la soledad no resulta sencillo y a veces se presentarán dudas sobre si es el camino adecuado. Sigue tu proceso y confía en ti y en tus cualidades para gestionar tu vida de forma exitosa. Ten fe en ti.

12. Recuerda que el cambio es continuo

El final del camino del cambio no se ve porque no existe, la vida es un proceso continuo. Mantén la mente abierta a nuevos cambios y ajustes a lo largo del tiempo.


Recursos adicionales

  • Libros recomendados: "El poder de los hábitos" de Charles Duhigg, "Hábitos atómicos" de James Clear.
  • Cursos en línea: Coursera, Udemy, SerfCarm y plataformas similares ofrecen cursos sobre desarrollo profesional y personal.

Comparte tu experiencia

¿Qué cambios has logrado implementar en tu vida? ¿Qué estrategias te han funcionado mejor? Comparte tu experiencia en los comentarios y ayúdanos a crear una comunidad de apoyo.

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